La de días que llevo sin tocar el teclado, llegar reventado del curro no ayuda nada. El otro día estaba leyendo un comic del capi y me dice la parienta, "¿Cómo puedes ver con el comic pegado a la tocha?" Me había quedado frito en la primera página y, posiblemente, en la primera viñeta. No era el momento óptimo, no.